MYANNMAR EN PONY EXPRESS

Minglava!

Acabo de regresar a Bangkok desde Birmania. Preparado para apurar mis ultimos dias en este intenso, corto y magico viaje por el sudeste asiatico.

Aun conservo en mi retina la luz de Myannmar. La luz de sus paisajes, de sus selvas, de sus rios y pagodas. Y sobre todo la luz casi cegadora de su gente.



Mis hermanos Benja y Paco se unieron a mi el 17, llenos de fuerza, energia y enormes deseos de recorrer el pais.



Durante 12 dias eternos y fugaces hemos paseado campos, selvas y caminos, a pie, en bicicleta y en interminables sesiones de saltarines autobuses, mezclados promiscua y alegremente con los birmanos.



Filosofamos, charlamos, nos reimos sin parar, y nos dimos cuenta que la amabilidad y la hospitalidad, por alguna extragna razon, estan en dura guerra con el progreso material.



Los nignos Palaung y Danu jugaron con nosotros, los abuelos Taung se sorprendieron de nuestras pieles blancas, sonreimos mil veces a las chicas campesinas, y aprendimos lo que significan los verbos dar y ofrecer.



Nos hemos emocionado, y quedado sin habla, cada vez que tras otro recodo del camino, una persona nos ha sonreido, saludado, y ofrecido fruta o te. Siempre a cambio de nada.

Un viaje iniciatico.

Birmania, Myannmar. Gracias. Yi sube.


Hasta muy pronto.


Alex


Psdt; LIBERTAD PARA MYANNMAR. YA!!