Fotos; El Nasi con y sin huevo.
Nasi Goreng significa literalmente “arroz frito”, y es uno de los platos mas populares de la cocina indonesia.
Reconozco que esta receta lleva un puntito de mala leche. Si, poco pero algo. Lo digo porque en cierto sentido este post es una reacción contra el insufrible, omnipresente y cansino “arroz tres delicias” de los chinos de toda la vida…
En Asia, de Pakistán a Vietnam, y de Filipinas a Corea, cada país, cada región, tiene su propio arroz frito, salteado con los productos de su tierra, y condimentado de acuerdo con los gustos de sus gentes.
Nasi Goreng, Khao Pat, Com Trom… y así muchas docenas.
Quizá el Nasi Goreng sea uno de los mas conocidos dentro y fuera de Indonesia. Su peculiaridad es que combina dos sabores poderosos, dulce y picante.
Es picante porque suele cocinarse con guindillas o pasta de chiles. El dulzor se lo proporciona una salsa típicamente indonesia, el Kecap Manis. Salsa de soja dulce y muy espesa, preparada con azúcar de palma. Una cucharadita sirve para dar sabor y teñir de negro un plato. Es fácil de encontrar en establecimientos asiáticos.
Además se añade ketchup o salsa de tomate, y las verduras que se tenga a mano. Yo he empleado solo zanahoria, pero la col y las judías verdes suelen ser comunes.
He omitido el trassi, la pasta de gambas indonesias. Quería hacer una receta mas sencilla y totalmente vegetariana.
Quizá la peculiaridad del Nasi Goreng sea la forma en que se acompaña. Lo habitual es coronarlo con un huevo frito, y flanquearlo con satays (pinchos de pollo), rodajas de tomate y pepino y kerupuk. El kerupuk es el pan de gambas que ponen en los restaurantes chinos, esas galletas blancas o rosadas con ligero sabor a marisco…
Mi relación con el Nasi Goreng es un tanto ambigua. Me encanta, eso seguro, y recuerdo haberlo comido por primera vez hace muchos años, en el restaurante Bali en Madrid.
Pero por otro lado me trae recuerdos de mis primeros viajes por la isla de Flores, cuando el nasi goreng y el ayam goreng eran la base de todas las comidas de todos los días. Un viaje lleno de incidentes, amenazas, escapadas y arroz frito…
Me quedo con lo bueno. Sigue gustándome mucho.
La receta es una versión de varias que he probado, pero es un homenaje a Santika, el cocinero indonesio de la Isla del Tesoro que me la proporcionó amablemente. Gracias.
Dos cosas antes de finalizar, LAS DOS REGLAS DE ORO DEL ARROZ FRITO;
1- Cueza el arroz al vapor. Es decir lávelo antes de cocerlo, pero nunca después.
2- Lo mas importante, cocine este plato con arroz cocido ENFRIADO, de ese modo no se pegará y se convertirá en un engrudo incomible.
Ingredientes;
1 taza de arroz de grano largo, preferiblemente jazmín. Hervido y enfriado
2 cucharadas de chalotas picadas
1 ajo picado
1 cucharada de zanahorias picadas
1 cucharada de tomate frito casero o ketchup
1 cucharada de salsa de soja clara (o más, puesto que no se suele usar sal)
1 cucharadita de kecap manis
1/2 cucharadita de chili paste o el picante que desee
Pimienta negra
1 cucharada de cebolleta picada, la parte verde
Acompañamientos
1 huevo frito por persona
2-3 satays (pinchos de pollo a la parrilla)
Unas rodajas de tomate
Unas rodajas de pepino
3-4 galletas de gambas fritas
Preparación,
En una sartén honda o wok ponga un par de cucharadas de aceite. Saltear las chalotas, el ajo y la zanahoria hasta que estén tiernas y doradas.
Añada el arroz y mezcle.
Sazone con el tomate frito, las salsas de soja y la pasta de chile. Mezcle bien y saltee sofriendo el conjunto.
Rectifique de sal, pimienta, picante o soja. Añada la cebolleta, mezcle y retire.
Emplee un pequeño cuenco como molde, llénelo de arroz y emplátelo.
Encima del arroz ponga un huevo frito, y a los lados los satays, tomate, pepino y pan de gambas.
Que rico!